DISTRITO NACIONAL, República Dominicana.- El sistema de partidos de la República Dominicana, conforme a la dinámica que les imponen sus normas estatutarias y las leyes, ocasionalmente se avocan a la renovación de sus respectivas estructuras de mando que incluyen la Presidencia, Vicepresidencia, Secretaría y Subsecretarias Generales y de Organización, direcciones Nacionales, Regionales, Frentes de Masas y de Seccionales en el exterior, entre otros cargos del organigrama partidario.
A falta de una ley de Partidos que regule taxativamente los mecanismos de elección intrapartidaria, éstos se ven en la necesidad de implementar sus propios sistemas, que tradicionalmente son: convenciones, asambleas y/o primarias, entre otros mecanismos.
Este laborantismo trae consigo movilidad en el seno de las agrupaciones políticas, en la que salen a relucir aspirantes para ocupar esas posiciones. Un sano ejercicio que fortalece la democracia interna y permite la alternabilidad en los cargos.
En este contexto, es justo reconocer que muchas de estas aspiraciones se sustentan en méritos acumulados, experiencias, lealtades, capacidad y, por qué no, también se filtran aspirantes oportunistas, trepadores y de escasa formación ética y moral.
A tono con esa dinámica, como sabemos, desde el pasado mes de diciembre el Partido Revolucionario Moderno (PRM) ha iniciado el proceso de inscripción de candidaturas para cargo de elección partidaria de cara a la Convención Ordinaria que tiene pautada para febrero próximo.
De su lado, la facción del Partido Reformista Social Cristiano encabezadas por Federico Antún Batlle (Quique) y Rogelio Genao, tras una asamblea para renovar su dirección, se ha visto estancado a la espera de una decisión final del Tribunal Superior Electoral, luego de ser apoderado de una instancia de nulidad por la otra facción encabezada por Ito Bisonó y Josecito Hazim.
Mientras que el PLD aún no ha anunciado su proceso de renovación, la que habrá de hacer en su oportunidad para cumplir con los requisitos que en sentido pautan sus estatutos.
En tanto, en diciembre pasado la XXXIV Convención Extraordinaria del PRD, escogió y proclamó a Miguel Vargas Maldonado, como presidente de la organización para el período 2017-2021. A Tony Peña Guaba como secretario General y a Rafael-Fiquito- Vásquez como secretario Nacional de Organización, Víctor Gómez Casanova, director Nacional de Comunicación, Rafael Suberví Bonilla presidente del Comité de Distrito nacional y Juan Santiago, secretario Ejecutivo.
Los demás cargos directivos deberán ser ocupados mediante mecanismos propios de elección, respetando siempre las normas estatutarias correspondientes.
Luego de este proceso, me he enterado del activismo desplegado por un trío de valiosas mujeres, por demás entrenadas en las lides del Partido blanco, aspirantes a dirigir desde diferentes estamentos la Federación Dominicana de Mujeres Socialdemócrata (FEDOMUSDE), organismo que agrupa a la féminas perredeístas.
Estas mujeres al parecer lucharán “en bloque”, porque hasta mí ha llegado un prototipo de “afiche” que sería impreso a full color en los próximos días y publicitado a nivel nacional, como a través de las diferentes plataformas digitales, dando a conocer sus aspiraciones.
Me refiero a las aguerridas Nadia Andújar, Abril Peña y Betty Báez. Un verdadero equipo de nóveles grandes ligas en el seno del PRD.
Nadia aspira a la presidencia, Betty a la secretaría General y Abril a la secretaría de Organización, respectivamente. Qué tripleta!!
De cada una de ellas no hay que abundar mucho…meritorias, leales, incansables trabajadoras, con muchas millas de trabajo político en sus alforjas al lado de Miguel Vargas, y a las que habrá que emplearse a fondo para vencer, si es que lo logran. Esa es mi humilde apreciación.
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