Lo que nos enseñó Mr. White

SANTO DOMINGO.- (AUTORA: Talyam Vásquez, abogada y politóloga).- Cuando en República Dominicana empezaron a transmitir las novelas con historias relacionadas al narcotráfico inicié la crítica inmediata, bajo el alegato de que se incentivaba a delinquir, especialmente a los más jóvenes, pues el dinero y la vida de lujo que tenían los narcos les seduciría y no valorarían las comodidades alcanzadas con esfuerzo y trabajo.

Talyam Vásquez, abogada y politóloga.
Talyam Vásquez, abogada y politóloga.

Se transmitieron varias novelas y recuerdo las extensas conversaciones que se suscitaban cada mañana en mi lugar de trabajo, donde cada quien narraba su experiencia de la noche anterior viendo la novela, en ese momento transmitían el cartel de los sapos, inclusive confieso que me sorprendió ver a mis compañeros hablando de novelas y no es que me guste encasillar a nadie, ni asignarles rol a cada sexo, pero siempre había escuchado que las novelas son cosas de mujeres, así que cada mañana, tenía que reírme viéndolos comentarlas.

Aunque no prestaba atención a los argumentos que me invitaban a ver las novelas, ya que la música me acompañó en esos instantes en que se hablaba de “Martín González”, tengo que admitir que me dejé llevar y por la programación de la TV y no fue una novela propiamente, sino una serie norteamericana llamada Breaking Bad, en la que me adentré diariamente viendo tres o cuatro capítulos, luego de regresar del trabajo. Era el momento perfecto para relajarme, ya que desde el primer episodio te envuelven sus personajes es esa mezcla de lo inesperado con el característico humor negro norteamericano.

Breaking Bad es una serie estadounidense creada por Vince Gilligan, que se transmitió por primera vez en 2008, tiene como trama a un profesor de química con cáncer pulmonar y su antiguo alumno, quienes por coincidencias de la vida se reencuentran y deciden “cocinar” metanfetaminas. La serie consta de 62 capítulos y narra las vicisitudes que pasan estos personajes por el estilo de vida que deciden llevar y como llegan a corromper hasta su alma poniendo en riesgo a sus “seres queridos”.

 

Por si alguien no la ha visto, no voy a contar más y mucho menos el final, pero déjenme decirles que la enseñanza que me dejó Mr. White estará siempre presente en mí: nuestros actos y decisiones no solo nos afectan a nosotros, sino que también afectan a nuestro entorno, el dinero de la ilegalidad se escurre entre los dedos como si de arena y agua se tratare, otra enseñanza, es que por mas admiración y amor que tu pareja sienta hacia a ti, los engaños y mentiras, corroen ese amor, poniéndole termino de la manera más insospechada. Es que las vilezas del engaño son capaces de destruir el más sólido de los edificios emocionales que se crea haber construido. Y al final debo admitir que la serie de los narcos posiblemente le dejó a sus televidentes algún tipo de enseñanza, tal y como hoy admito me la dejó Breaking Bad.

Los comentarios están cerrados.