SANTO DOMINGO.- El 28 de noviembre de 2014 el Poder Ejecutivo envió al presidente de la Cámara de Diputados, Abel Martínez, la observación parcial del Código Penal, enviada para su promulgación. Esto implica que el Código no fue promulgado, ya que fueron observados 4 artículos: 107, 108, 109 y 110.
Dentro de las razones que expone el presidente Danilo Medina se encuentra el conflicto en que entraría la aprobación del Código con el principio establecido en la Carta Magna del Estado de Necesidad. Si bien es cierto que debe procurarse la vida del niño, no es menos cierto que hay aspectos básicos en los que debe procurarse la salud, emocional y física de una madre. Señala el presidente Medina que no se han planteado las excepciones que demanda el respeto a la dignidad humana, la integridad psíquica y moral y la salud, los cuales constituirán excepciones a la responsabilidad penal.
Esta observación que hace el Presidente a esos 4 artículos del Código Penal Dominicano, demuestran varios aspectos de su estilo.
PRIMERO: es un Presidente democrático que escucha el sentir de todos, pues gobernar no se trata de escuchar solamente una campana, aunque ésta sea de la de las Iglesias, y en especial la de la Católica.
SEGUNDO: es un presidente cauto en sus decisiones, ya no se dejó llevar por las presiones para aprobar una pieza que, al final, pudiera devenir en una misma trampa para él y su gobierno, y
TERCERO: La falta de consenso que hay en el Partido de la Liberación Dominicana, debido que es de conocimiento que la mayoría en ambas cámaras está conformada por el partido de Gobierno, evidencia de que no hay comunicación entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo.
En los próximos días vamos a experimentar manifestaciones de todos los grupos, tendremos a las Iglesias y los grupos conservadores con una voz cantante contra las observaciones que sugirió el Presidente, y veremos también como Profamilia, feministas y víctimas de este sistema exigirán que se respeten los derechos de las mujeres para decidir cómo enfrentar una situación tan catastrófica como un embarazo no deseado, que en la mayoría de los casos son productos de violación e incesto.
En lo personal, saludo la decisión del presidente Medina, en virtud de no hay terapia psicológica ni años de cárcel que quiten del corazón y la mente de una mujer cuando ha sido abusada y maltratada, además de que tenga la obligación de llevar no solo durante 9 meses, sino para toda la vida, la cara de su agresor.
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