El dembow, expresión cultural dominicana/Autora: Talyam Vásquez

SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Anteriormente,  les compartí mi artículo titulado “Diario de un Guía (2)”, en el que les comenté cómo acordamos cambiar en el aula las acostumbradas exposiciones por debates, en el trabajo final de la asignatura Introducción a la Sociología. A tales fines, seleccionamos 4 temas, colocando a la mayoría de los  alumnos en una posición, no muy cómoda para ellos, pues fueron ubicados en posiciones contrarias a sus posturas: los que rechazaban el dembow fueron retados a defenderlo y los que estaban a favor de los tatuajes debían encontrar lo negativo de esta práctica, y así sucesivamente.

La intención de este ejercicio fue permitirles a los alumnos ampliar sus horizontes en torno a las ideas y estereotipos que nos vamos formando sobre  las prácticas culturales de hoy.

Uno de los temas que elegimos en ese debate fue “Dembow, expresión cultural dominicana”. Dos estudiantes a favor y dos en contra, cada uno con sus justificaciones, con sus recursos audiovisuales y las correspondientes investigaciones,  que les permitieran enriquecer sus posturas. El resultado, tal y como les dije la semana pasada, fue un éxito total y rotundo. Los alumnos tuvieron muy buen desempeño.

Las conclusiones del debate académico en torno al dembow pueden resumirse en lo siguiente: es un género autóctono de los dominicanos, que nos caracteriza y nos identifica, ¿Cultura? En cuanto a las letras, las reconocimos como causticas, hirientes, desafiantes y agresivas; sin embargo, reconocimos que para unos es su realidad social, ¿una subcultura?, ¿minorías? El lenguaje agresivo lo señalamientos en contra de las mujeres y con elementos de ¿Discriminación? ¿Prejuicio? ¿Estereotipo?

Si bien es  un llamado de auxilio, la pobreza del lenguaje en la exposición de sus razones y sin razones, impiden que este llamado llegue a las instancias con cuyo accionar se generarían los cambios requeridos, porque aunque todos  reconocemos que cada día se van desvaneciendo los valores familiares y educativos, dando paso al culto a la individualidad, y al yo, entendemos que la transmisión del mensaje del dembow debe mejorar para lograr llegar allí donde necesita ser escuchado, para lograr el cambio requerido por su denuncia.

Es justo reconocer, no obstante, que el género ha avanzado en su difusión de las manos de jóvenes de talento, que se destacan y son excelentes exponentes de las ansias y sueños de otros jóvenes dominicanos.