Leonel Fernández se apresta a abandonar las filas del PLD y obligaría a una segunda vuelta en comicios de 2020
DISTRITO NACIONAL, República Dominicana.- El expresidente Leonel Fernández despejará la noche de este jueves las dudas que existen en torno a su futuro político dentro del Partido de la Liberación Dominicana, con la premisa de que tiene todo listo para abandonar sus filas y refugiarse en la agrupación Fuerza del Pueblo, mediante la cual podría presentarse como candidato independiente para las elecciones de 2020.
Para las diez de la noche está previsto que Fernández se dirija al país para trazar la línea política que emprenderá desde ahora, pocas después de que, a las cuatro de la tarde de este jueves, el PLD juramentó a Gonzalo Castillo como su candidato presidencial para los venideros comicios. También los demás candidatos al Congreso Nacional y a las alcaldías fueron juramentados por el secretario general Reinaldo Pared Pérez y demás miembros de la cúpula de la organización.
El exjefe del Estado tendrá su alocución por vía de una red de radio y televisión, después que el pasado domingo indicara que “será en el transcurso de los próximos días cuando haré referencia a la situación que actualmente concierne al Partido de la Liberación Dominicana”.
Hace pocas horas que Bautista Rojas Gómez, cercano colaborador de Fernández, presentó su renuncia como ministro sin Cartera del Gobierno, mientras que Gedeón Santos fue destituido como representante dominicano ante la Organización de Estados Americanos, supuestamente por tener afinidad política con el exmandatario.
La virtual salida del expresidente Fernández vendrá a producirse en medio de fragor de críticas y descalificaciones que le lanzan funcionarios y dirigentes del Comité Político del PLD por su postura de cuestionar y denunciar la comisión de irregularidades que habrían empañado la transparencia de las primarias del seis de octubre para beneficiar el triunfo de Gonzalo Castillo.
Miembros del Comité Político y hasta funcionarios del Gobierno han admitido que la renuncia de Fernández podría reestructurar el cuadro político de cara a las elecciones de mayo, en virtud de que tendría la oportunidad de obligar la celebración de una segunda vuelta en la que participarían tanto el PLD como el Partido Revolucionario Moderno, encabezado por Luis Abinader.
En las cuestionadas primarias del PLD, el exgobernante y sus seguidores dentro del PLD concitaron el respaldo de cerca de 900 mil votaciones, para un 47 por ciento del cómputo final de la Junta Central Electoral, solo con un 1 por ciento por debajo de Gonzalo Castillo y las fuerzas que motoriza el presidente Danilo Medina.
Algunos expertos prevén que el futuro de Fernández dentro del PLD se tornaría totalmente sombrío, ya que ha sido víctima de diatribas y de cuestionamientos públicos por parte de sus subalternos políticos que han reaccionado adversos a sus denuncias sobre la existencia de un supuesto fraude en las primarias mediante la filtración de los sistemas informáticos de la JCE.
Sin embargo, el propio exmandatario ha argumentado que su lucha por la transparencia de las primarias no obedece a ningún interés particular en encabezar una nominación presidencial, sino más bien porque en el país se establezca el respeto a la voluntad popular y se fortalezca la democracia, que entiende amenazada por maniobras que atribuye a sectores del Gobierno y del grupo de Medina en las filas peledeístas.
Dirigentes como Melanio Paredes y José Tomás Pérez han aconsejado que Fernández continúe en el redil del peledeísmo y mantenga su lucha por la reunificación de la militancia de la organización, pero la rivalidad ya conocida con el grupo denominado “danilismo” dificulta cualquier posibilidad de entendimiento y de negociaciones que pudieran ser cumplidas en medio de las diferencias ideológicas y de concepción democráticas que cada día alejan a esos bandos en pugna.
Cercanos colaboradores de Fernández están plenamente convencidos de que su líder no tiene ninguna posibilidad de maniobra en las filas del PLD a favor de fortalecer su liderazgo y potenciar una virtual candidatura presidencial para los comicios de 2024, en virtud de que el presidente Medina no esconde su apetencia de aglutinar sus fuerzas para buscar nuevamente retornar al Palacio Nacional tan pronto concluya el mandato que se iniciará en agosto de 2020.
Figuras del grupo calificado “leonelistas”, como Roberto Rosario, entiende que el exjefe del Estado y hasta este jueves presidente del PLD no puede incurrir en el error de sentarse a negociar un acuerdo con el presidente Medina y sus seguidores, muchos menos que incluya a miembros del Comité Político, muchos de los cuales han trazado una línea divisoria mucho antes de las primarias que se cuestiona por tener “vicios de irregularidades” que ameritan ser anuladas.
Rosario alega que Fernández “negaría toda su prédica y de nada habrá valido su lucha” si acepta un entendimiento con los sectores del Gobierno y del PLD que ha venido acusando de tener responsabilidad en el “denominado fraude colosal” que ha permitido que Gonzalo Castillo sea postulado este jueves como el candidato presidencial de la entidad.
El expresidente de la Junta Central Electoral y miembro del Comité Central del PLD indicó en su cuenta de Twitter que “es mejor morir de pie que vivir arrodillado”, en su negativa a que su líder decida llegar a negociaciones que implicarían un revés a sus proclamas a favor de la transparencia en las primarias y en su demanda de que habría sido favorecido con el voto de la mayoría de los ciudadanos que acudieron a ese proceso.
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