El calvario de los estudiantes

SANTO DOMINGO (AUTORA: Talyam Vásquez, abogada y politóloga).- Nos quejamos de que la juventud no quiere estudiar, de que los profesionales que salen de las aulas son unos mediocres y que ni escribir saben, que después de salir de las universidades no quieren volver, que los estudiantes becados en el exterior se van y no quieren regresar, que un país sin educación no avanza y miles de argumentos más. Pero nadie se atreve a enfrentar la realidad ni a decir la verdad.

Talyam Vásquez, abogada y politóloga.
Talyam Vásquez, abogada y politóloga.

Nadie es capaz de admitir que las universidades se están convirtiendo en retrancas atentando contra sus mismos clientes, que son los estudiantes. Así como se lee: los estudiantes ahora son clientes de las universidades, pero sus ejecutivos han olvidado que al cliente hay que tratarlo bien para que regrese a buscar el servicio que se ofrece.

La administración de la universidad entiende que más que ofrecer un servicio está haciendo un favor y algunos docentes se equivocan en su rol y no quieren aceptar que los paradigmas de la educación han cambiado y que ya no se permite el irrespeto y el abuso de poder.

Así no se puede… éste es el pleito del huevo y la piedra. En nuestro país los costos de postgrado y maestrías son muy elevados ¿Quién puede invertir en educación en dos años más de medio millón de pesos? Pocas personas en realidad, o se acude a un préstamo o se solicita una beca.

Si es un préstamo, los intereses te matan; cuando se finalizan los estudios es más la deuda que la posibilidad de obtener un empleo con la justa remuneración por los estudios realizados (hay que ser realistas, aquí no hay pesimismo) y el tema de la beca es otro, si se logra conseguirla la Universidad no la quiere aceptar, pues los empleados no quieren hacer la gestión de cobros, y si la aceptan  mandan a los estudiantes a que sean estos que hagan la gestión.

Esto es un suplicio ¿Quien se concentra para estudiar en estas circunstancias? Esto no es cuestión de sistema educativo, es un asunto que tiene nombres y cargos y pretendo escribir más del asunto, pero no quiero dejar desesperanza: como estudiantes somos más, y no debemos dejar que amarguras y frustraciones aposentadas en algunas de las Alma Mater de nuestro país, quieran contagiarnos con su negatividad, vamos a estudiar y a vencer obstáculos, ¡Arriba el conocimiento!, debemos mostrar al país la realidad de las universidades, y el irrespeto y el abuso con el que son tratados los estudiantes.

Cuando la tiranía es ley, la revolución es orden. Pedro Albizu Campos. 

Los comentarios están cerrados.