En audio, Argenis Contreras y Mercado Blanco conversan sobre la muerte de Yuniol Ramírez

DISTRITO NACIONAL, República Dominicana.- Tan pronto fue cometido el asesinato del abogado Yuniol Ramírez, ocurrido la tarde del miércoles de la semana pasada, el asistente del exdirector de la Oficina Metropolitana de Autobuses, Manuel Rivas, decidió marcharse del país y supuestamente se encuentra el Estados Unidos, según se revela en una conversación que sostuvo el prófugo con el implicado José Antonio Mercado Blanco (El Grande).

En el video, que fue difundido por el noticiario del mediodía de este miércoles por CDN Cadena de Noticias, el propio Argenis Contreras le confiesa a Mercado Blanco que parientes suyos del país y del extranjero tienen conocimiento de su paradero.

En la conversación que se prolongó por ocho minutos, Contreras y Mercado Blanco intercambian impresiones sobre los acontecimientos que se habían registrado después de haber asesinado al abogado Yuniol Ramírez, cuyo cadáver fue encontrado la tarde del jueves de la semana pasada en un arroyo de Manoguayabo, en el municipio Santo Domingo Oeste.

Hasta el momento de la conversación, Contreras le expresó a Mercado Blanco que la situación transcurría de manera perfecta, en referencia a la muerte del jurista Ramírez, quien había presentado un recurso ante el Tribunal Superior Administrativo para que la Omsa le entrega informaciones sobre varios contratos con empresas suplidoras de esa institución.

Los contratos que le reclamaba Ramírez fueron adjudicados a las empresas Grupo Martisdom, Tech Solution, EKT, Venditio Línea y Asociados, Josafap Inversiones y Soluciones Triaubaa.

En el audio que está en poder del Ministerio Público, Contreras le dice a “El Grande” que en el lugar del hecho de sangre le habría quedado un “cabo suelto”, que era un “maquito”, es decir un celular que “cayó”, pero le restó importancia a cualquier hallazgo por parte de las autoridades.

En el mismo lugar donde fue encontrado el cadáver de Ramírez, la Policía Nacional halló la tarde de este martes la camioneta en la que presuntamente habrían transportado al jurista asesinado, en cuyo interior Argenis Contreras le disparó y luego su cuerpo fue abandonado en el arroyo de Manoguayabo.

Esa camioneta, de acuerdo a Argenis Contreras, se le haría un “trabajo”, para lo cual se habrían contratado a dos mecánicos. Tan pronto fue cometido el hecho, el vehículo estuvo en poder de un hermano del asistente del exdirector de la Omsa, quien fue encargado de esa encomienda y después “pasaría a manos de otra persona”.