Monseñor Ozoria asume como Arzobispo de Santo Domingo

SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El nuevo arzobispo metropolitano de Santo Domingo asumió este sábado el cargo de manos del cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, en una ceremonia en la Catedral Primada de América, a la que asistieron el presidente Danilo Medina y la primera dama Cándida Montilla de Medina.

Con la entrega del báculo pastoral a cargo del nuncio apostólico monseñor Jude Thaddeus Okolo, Ozoria fue posesionado como nuevo arzobispo de Santo Domingo. 

Durante 35 años el puesto fue detentado por López Rodríguez y será reemplazo por monseñor Francisco Ozoria, cuya obra fue fundada en la caridad, la fe y el amor a Cristo y al prójimo.

Como sacerdote, Ozoria ha defendido los derechos de los inmigrantes y ha sido visto como uno de los principales defensores del trabajo pastoral del sacerdote Christopher Hartley.

Monseñor  Ozoria Acosta nació el 10 de octubre de 1951 en Nagua, diócesis de San Francisco de Macorís. Realizó sus estudios primarios en las escuelas Payita y Mercedes Bello de Nagua; y los estudios medios los realizó en el Seminario San Pío X de Licey al Medio en Santiago de los Caballeros.

Cursó los estudios filosóficos en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra de Santiago de los Caballeros; y los estudios teológicos en el Pontificio Seminario Mayor Santo Tomás de Aquino, Santo Domingo.

Fue ordenado sacerdote el 2 de septiembre de 1978 en la diócesis de San Francisco de Macorís. Luego de su ordenación presbiteral fue destinado a trabajar en la Pastoral Vocacional de San Francisco de Macorís, director de la Obra Diocesana de las Vocaciones Sacerdotales, vicerrector y formador del Seminario Menor Santo Cura de Ars, La Vega en 1978.

En 1988 fue enviado a Roma para estudiar en la Pontificia Universidad Lateranense, donde se licenció en 1990 en teología pastoral. De regreso al país fue formador y profesor de teología pastoral en el Pontificio Seminario Santo Tomás de Aquino de la arquidiócesis de Santo Domingo en 1990.

Fue párroco de la parroquia de la Santísima Trinidad de Nagua y de la de San Francisco de Asís de El Factor en 1992, y también de la de Santiago Apóstol de Arroyo al Medio. El 1° de febrero de 1997, al crearse la Diócesis de San Pedro de Macorís, fue nombrado por el papa Juan Pablo II como su primer obispo. Recibió la ordenación episcopal el 15 de marzo del mismo año, y en la misma celebración tomó posesión canónica de su diócesis.