SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El Sistema de la Seguridad Social ha presentado avances importantes, esencialmente por el aumento en los afiliados.
Sin embargo, aún persisten problemas en la cobertura a las enfermedades, pues cada día se excluyen más servicios y los procedimientos vitales para salvar vidas.
Pero también persisten los traslados involuntarios de afiliados de una ARS a otra, un problema que se agrava cada día, en vez de mejorar.
Se presta a malas conjeturas, el hecho de que cuando un empleado público o privado reclama afiliarse a la ARS de su preferencia, la gerencia de Recursos Humanos de la empresa o institución en la que trabaja, le argumenta que cayó de forma automática en otra.
Aunque al empleado no le convenga o esté inconforme, tiene que permanecer un año para poder cambiarse, sin importar el mal servicio que esa prestadora de salud ofrezca.
La Dirección de Información y Defensa de los Afiliados (DIDA) es la primera en confirmar que la mayor cantidad de quejas que llegan a la institución, tienen que ver justamente con la falta de cobertura de procedimientos médicos que les son indicados a los pacientes.
La negación de los servicios sigue siendo el principal problema de la Seguridad Social del país.
Imagínese lo que implica para una familia pobre, caer en manos de una ARS deficiente con cobertura precaria y que tenga que esperar una año para aplicar y transferirse a otra.
Sin dejar de mencionar el problema del copago, creemos que esa son de las grandes fallas de las que adolece el Sistema Dominicano de la Seguridad Social, y que hay que corregir o mantenerse vigilante.
Esto de afiliar a empleados de forma inconsulta es una queja vieja que no tomarse en cuanta, puede dar pie a que la sombra del soborno o mafias, permeen a algunas gerencias de Recursos Humanos de empresas privadas e instituciones públicas.
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