El “sí o sí” sobre las elecciones de julio

DISTRITO NACIONAL, República Dominicana.- La Junta Central Electoral es  la menos indicada para propagar pesimismo sobre la celebración de las elecciones presidenciales y congresuales previstas para el 5 de julio, en medio del temor generalizado que prevalece en el país por la pandemia del coronavirus.

Hasta el último momento la convocatoria a esa cita constitucional es irrevocable y nadie, no importa el partido ni el sector económico o social, pueda atentar contra el derecho de la población a acudir a las votaciones y elegir a las nuevas autoridades que irán al Palacio Nacional y al Congreso Nacional.

El “sí o sí” sobre los comicios venideros lanzados por el presidente de la Junta Central Electoral, Julio César Castaños Guzmán, debe ser un clamor colectivo de los partidos y de la ciudadanía que estén comprometidos con el fortalecimiento de la democracia y del sistema institucional, a pesar de las malas experiencias vividas con la suspensión de las elecciones municipales del 15 de febrero y que fueron celebradas el 15 de marzo, además del trago amargo que representaron las primarias del 6 de octubre pasado.

Solamente causas naturales pueden obligar que la Junta se resista o se vea obligada a suspender nueva vez el proceso del 5 de julio, nunca presiona por factores ajenos a su voluntad y responsabilidad, mucho menos al interés colectivo de que el país supere las situaciones vergonzosas recientes que hirieron nuestra democracia.

Las especulaciones sobre supuestos aprestos de sectores políticos en un soterrado intento de boicotear las elecciones de julio deben ser desterradas y toda la ciudadanía asumir la plena conciencia de que el 5 de julio hay que acudir a votar por los candidatos presidenciales y al Congreso Nacional que mejores llenen las expectativas colectivas.

Hay que insistir en que salvo fenómenos fuera de la voluntad humana, como que la pandemia del coronavirus se expanda más allá de la prudencia y ponga en peligro la salud de la población, entonces hay que pensar que la celebración de las elecciones venideras resultan impostergables por los niveles de frustración y de rivalidad que albergan diferentes sectores, lo que podría mermarse solo con el relevo de autoridades legítimas escogidas de un proceso democrático y abierto , además de transparentes y confiables.

El “sí o sí” para las elecciones del 5 de julio que ha lanzado el presidente de la Junta en un foro virtual organizado por la Organización de Estados Americanos debe ser un grito de guerra para todos los amantes y protectores de la democracia.